Criando mariposas

Los padres siempre están buscando el regalo más emocionante y original para sus hijos, darles la posibilidad y enseñarlos a criar mariposas puede ser una excelente opción en este caso.  Para ello puede llevar a los niños a una caminata con el objetivo de buscar huevos de mariposas y recogerlos, luego hacer un hogar para ellos, asegurándose de proporcionarles el alimento apropiado para las orugas, algo para que puedan hacer su capullo y algo para que las mariposas coman una vez que salgan. Asegúrese de tener una alimentación adecuada y fresca cerca de sus orugas hambrientas, haga agujeros pequeños en la tapa del frasco donde las mantiene o cubra la parte superior con una malla fina sostenida con una banda elástica. Coloque además una toalla de papel húmeda en el recipiente y limpie con frecuencia la caja de excrementos. Vaya recolocando las plantas para comer según sea necesario, ya que las orugas recién nacidas crecen necesitarán un montón de alimentos y espacio para crecer.

La experiencia educativa de criar mariposas es algo que sus hijos nunca olvidarán. Ellos van a aprender sobre el ciclo de vida de la mariposa porque van a ver el día a día de la transformación que ocurre desde los huevos hasta las bellas mariposas que vemos revoloteando por ahí. Asegúrese de poder ver cada etapa del desarrollo de una mariposa con cuidado, observe cómo cambia el color del huevo antes de la eclosión, cómo la oruga come, se mueve y cómo cambia sus características a medida que crece. Compruebe el estado de la  crisálida a menudo para que pueda liberarse el adulto tiempo más tarde.
Los niños también aprenderán sobre la conservación de las mariposas y van a estar ayudando a salvarlas. Las mariposas están desapareciendo a un ritmo alarmante, al igual que muchos insectos, por causa del desarrollo urbano. Criarlas y luego liberarlas en su hábitat natural es una de las mejores maneras de ayudar a salvar la especie.

Los niños pueden ser responsables de la limpieza de la casa de las mariposas y su alimentación, esta es una maravillosa alternativa para regalarles una mascota, bien diferente de un gato o un perro.

Siempre recuerden, si deciden practicar esta cría, que una vez que las mariposas han emergido de sus capullos, los niños deben poder verlas por un día o dos, pero deben ser liberadas dentro de ese tiempo para que rápidamente puedan aprender a estar solas en la naturaleza. Además, debe tenerse en cuenta, que las mariposas sólo tienen un promedio de vida de unas pocas semanas.